MADRID, 5 de noviembre. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha arremetido este miércoles contra el actual Gobierno español, al que acusa de actuar con impunidad y de protagonizar situaciones embarazosas debido a lo que califica como un "proyecto guerracivilista" cuyo único fin sería evitar que la derecha asuma el poder.

En una reciente entrevista en 'esRadio', la líder regional no escatimó en críticas hacia el PSOE, señalando que sus acciones delictivas son tan aceleradas que la preparación de los plenos, programados para los jueves, se realiza a altas horas de la madrugada. “Para entonces, probablemente habrá surgido una nueva oleada de escándalos”, advirtió.

Específicamente, centró sus ataques en el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, tras analizar el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre Ángel Víctor Torres, donde, según ella, no se encuentran las “graves irregularidades” que se le achacan. Ayuso insistió en que las críticas hacia su gobierno se originan solo por su tendencia progresista.

La presidenta no dudó en señalar la "desfachatez" del ministro de Justicia, quien, en su opinión, abandona a los jueces y se presenta como una víctima de una supuesta persecución por sus ideas progresistas. "No se puede ser tan cínico", subrayó la dirigente madrileña, quien además criticó el intento del Gobierno de fusionar los distintos poderes del Estado.

Además, Ayuso cuestionó a Torres por afirmar que "en su caso no había prostitución", reflejando así el nivel de corrupción en la que cree que se encuentra el Gobierno. La dirigente destacó que lo verdaderamente alarmante es la alianza con Bildu, lo que considera un respaldo al terrorismo en el país. "Desde el inicio, se trata de corrupción en su máxima expresión", añadió.

La líder del PP en Madrid argumentó que cuando "se ignora el Estado de Derecho", el resultado es "el ridículo del que todos somos testigos", y subrayó la falta de respeto por las reglas democráticas. Para Ayuso, el Gobierno actual promueve un agenda "totalitaria", levantando un muro de división que desalienta la convivencia y permite que cualquier irregularidad quede impune. "Así, cualquier corrupción pasa desapercibida", concluyó.