Un nuevo capítulo se abre en la emblemática Puerta del Sol de Madrid, donde se darán inicio a los trabajos de desmantelamiento de los toldos instalados el año pasado. Esta operación, que costará alrededor de 200.000 euros, no solo abarca el desmontaje, sino también la tarea de reinstalarlos en mayo, coincidiendo con el regreso de las altas temperaturas.

La delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, quien ofreció la información desde Valdebebas, reconoció que el proceso de desinstalación será un reto. Aseguró que la complejidad del desmontaje, que incluye la manipulación de cables y la estructura asociada a los bancos, tomará aproximadamente tres semanas en finalizarse.

García Romero comentó que el trabajo no se limita solo a quitar los toldos. Parte del esfuerzo incluye transportar bancos a Galicia para su desmontaje, así como adaptar la infraestructura a las exigencias locales y asegurarse de cumplir con las regulaciones del Patrimonio, dado que la estructura original tuvo que ser modificada para alinearse con las demandas de la Comisión de Patrimonio.

La delegada defendió la inversión al enfatizar que el costo de 200.000 euros no es únicamente para el desmontaje. Este presupuesto abarca todas las fases: el almacenamiento, la limpieza y el futuro montaje de los toldos para el próximo año, coincidiendo nuevamente con el verano.

“Al referirnos a los toldos, también estamos hablando de la obra civil necesaria para su instalación, que, como saben, es temporal y debe ser retirada y luego reinstalada”, explicó García Romero, asegurando que esos 200.000 euros también cubren el nuevo montaje.

Al ser consultada sobre la recepción que los toldos han tenido entre la ciudadanía, la delegada se mostró convencida de que han sido bien valorados: “Al final, sí que han gustado. Ha sido la solución posible, a pesar de la complejidad que implicó su instalación y las restricciones impuestas por Patrimonio, que incluso dictó el color y el tipo de tela de los toldos”, agregó.

Además, destacó el impacto positivo que los toldos han tenido, señalando que lograron reducir la temperatura en la zona entre 5 y 10 grados, basado en estudios realizados por técnicos. “Estamos satisfechos con los resultados. Los madrileños ahora cuentan con una Puerta del Sol que es completamente peatonal, un logro derivado de un proyecto premiado en 2014 y avalado por la Comisión Local de Patrimonio”, concluyó García Romero.