El fiscal general se presenta solo en el Supremo para enfrentar su juicio, utilizando un coche oficial.
Este lunes, Madrid se convertía en el escenario de un acontecimiento sin precedentes cuando el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, arribó a las 9:40 horas a la sede del Tribunal Supremo, donde se enfrenta a un juicio por la presunta filtración de datos sensibles relacionados con Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Vestido con un traje sobrio y sin compañía, García Ortiz salió de su coche oficial, estacionado en la puerta del tribunal, donde un grupo de fiscales se congregó para mostrarle su apoyo antes de su entrada. El fiscal general accedió a la corte por la entrada principal, reservada para figuras de alto perfil, mientras algunas personas le aplaudían.
La presencia de numerosos medios de comunicación aguardando su llegada era evidente desde primera hora de la mañana. Aunque el fiscal decidió mantener silencio, se consigue una notable cobertura mediática: más de 200 periodistas, representando a 59 distintos medios, se han acreditado para cubrir un juicio que se anticipa que dure hasta el 13 de noviembre.
Este juicio marca una etapa histórica: es la primera vez que un fiscal general del Estado es juzgado en ejercicio de su cargo. García Ortiz enfrenta acusaciones graves, incluyendo la revelación de secretos, al ser señalado por presuntamente haber facilitado a la Cadena SER un correo electrónico confidencial enviado por el abogado Carlos Neira. En dicho correo, Neira proponía a la pareja de Díaz Ayuso reconocer dos delitos fiscales a cambio de un acuerdo que evite su encarcelamiento.
En el transcurso del juicio, se espera que alrededor de 40 testigos sean llamados a declarar, incluyendo fiscales, abogados políticos, agentes de comunicación y miembros de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil.
La primera jornada de audiencias promete ser intensa, comenzando con cuestiones preliminares que podrían ser planteadas por la defensa o las acusaciones. El primer testigo será Julián Salto, el fiscal que inició la investigación sobre González Amador y mantuvo correspondencia con Neira para discutir posibles acuerdos. Salto es el responsable de haber enviado a García Ortiz los correos electrónicos clave que giran en torno al caso, el cual incluye la presunta filtración del 13 de marzo de 2024 a la Cadena SER.
Posteriormente, Pilar Rodríguez, quien fue jefa de la Fiscalía Provincial de Madrid y que anteriormente se encontraba imputada, testificará tras ser exonerada. Le seguirá Almudena Lastra, jefa de la Fiscalía Superior de Madrid, quien durante la fase de instrucción ya había cuestionado a García Ortiz sobre su implicación en la filtración, obteniendo como respuesta: "Eso no importa ahora."
La sesión de la mañana concluirá con la declaración de Diego Villafañe, un estrecho colaborador del fiscal general que también estuvo involucrado en el caso al solicitar documentación relacionada con González Amador.
En la parte vespertina de esta jornada inaugural, se están programadas las declaraciones de los jefes de prensa de la Fiscalía General del Estado y de la Fiscalía de Madrid, quienes jugarán un papel fundamental en esclarecer los acontecimientos que condujeron a la publicación de una nota de prensa crucial emitida a las 10:20 del 14 de marzo de 2024, dando inicio a este complejo proceso judicial.
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