24h Madrid.

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"La Policía busca a los padres del bebé hallado muerto en Valdemingómez"

Madrid, 26 de junio.

El Grupo VI de Homicidios de la Policía Nacional se encuentra en la búsqueda de los padres del bebé recién nacido cuyo cuerpo sin vida apareció ayer por la mañana en la planta integral de tratamiento de residuos de Valdemingómez, según información proporcionada por fuentes policiales a Europa Press.

Fue un trabajador de la planta de clasificación de envases del centro de tratamiento 'La Paloma' quien, alrededor de las 7:30 de la mañana del martes, descubrió lo que parecían ser restos humanos entre la cinta de residuos plásticos, lo que llevó a la inmediata detención de las máquinas.

Al acercarse, se confirmó que se trataba de un bebé recién nacido, de piel morena, desnudo y con el cordón umbilical aún unido. Presentaba cortes y manchas de sangre aparentemente causadas por los golpes de los contenedores y camiones de basura por los que había pasado. Ante esta situación, se dio aviso de inmediato a la Policía.

En el lugar se presentaron agentes del Grupo VI de Homicidios y del DEVI para llevar a cabo la recolección de pruebas e iniciar la investigación del caso. Tras el levantamiento del cuerpo al mediodía, el bebé, que había nacido a término, fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Valdebebas, donde posiblemente se le practicará la autopsia hoy. Los médicos forenses deberán determinar si nació muerto, durante el parto o posteriormente, de forma accidental u homicida.

Según los agentes, se cree que el bebé fue arrojado a un contenedor amarillo en algún punto de Madrid horas o días antes de su hallazgo. Por esta razón, se encuentran interrogando a los trabajadores del servicio de recogida de residuos para verificar si notaron algo sospechoso durante su jornada laboral.

Esta lamentable situación no es la primera vez que un bebé sin vida llega al vertedero de Valdemingómez. En abril de 2017, los trabajadores encontraron entre la basura a un bebé de aproximadamente siete meses de gestación. En 2012, en mayo y julio, se encontraron los cuerpos de otros dos recién nacidos, un niño y una niña. Nueve años después, la madre de la niña fue detenida, una ecuatoriana de 30 años, acusada de homicidio.