El Ayuntamiento de Madrid se encuentra inmerso en el proceso de "fortalecer" su Semana Santa de cara al año 2025, que ha concluido este domingo con la icónica tamborrada en la Plaza Mayor a cargo de la Real e Ilustre Congregación de Nuestra Señora de la Soledad y Desamparo.

En este cierre de festividades, el alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, acompañado de la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha destacado la importancia de este día para los madrileños, resaltando las raíces cristianas de la capital.

"Feliz Pascua de Resurrección a todos los madrileños, en un día tan significativo para el catolicismo. Madrid es una ciudad con una fuerte tradición cristiana", expresó Almeida a los medios presentes.

El regidor de la ciudad ha elogiado la Semana Santa madrileña, que a pesar de los contratiempos climáticos ha logrado captar la atención de la familia real, incluyendo la asistencia del Rey Felipe VI, la Reina Letizia y sus hijas a la procesión de la Real e Ilustre Congregación de Nuestra Señora de la Soledad y el Desamparo.

"Cada año la Semana Santa gana más relevancia, con impresionantes cifras turísticas, a pesar de los problemas. Las calles de Madrid y nuestras procesiones se vuelven cada vez más importantes, lo cual es un avance significativo", celebró el alcalde.

En este sentido, ha asegurado que el próximo año se fortalecerá la Semana Santa, centrándose en aspectos como la recién estrenada carrera oficial. También anticipó que se trabajará de la mano con las hermandades de la ciudad para elevar la relevancia de la Semana Santa de Madrid a niveles aún mayores.