En un nuevo capítulo de la compleja relación entre el Ayuntamiento de Madrid y el Gobierno de España, se han acordado conversaciones futuras para abordar el crítico tema de la movilidad en la A-5, afectada por las obras de soterramiento. Esta decisión llega tras una reciente reunión que concluyó sin llegar a un consenso satisfactorio para ambas partes.

La vicealcaldesa madrileña, Inma Sanz, quien también actúa como portavoz del Gobierno municipal, informó en una rueda de prensa que se han establecido recientes contactos entre el Ayuntamiento y representantes del Ministerio de Transportes, y que se ha propuesto una nueva cita, aunque aún sin una fecha concreta. Sanz subrayó la importancia de mantener el diálogo abierto para encontrar soluciones a los desafíos de movilidad que enfrenta la ciudad.

En su intervención, Sanz destacó la percepción de una "actitud favorable" por parte del Ministerio, lo que podría facilitar el cumplimiento de los plazos establecidos para las obras y favorecer un entendimiento en cuanto al plan de movilidad necesario para mitigar los impactos de las obras en la A-5. La vicealcaldesa expresó su confianza en que esta iniciativa reciba la aceptación adecuada por parte de todas las partes involucradas.

A pesar de los intentos de diálogo y colaboración, el último encuentro no logró concretar acuerdos significativos. Durante esta reunión, el Consistorio recriminó al Ministerio de Transportes por lo que considera una falta de lealtad en las negociaciones, y reafirmó su postura firme de no contemplar ningún retraso en las obras en curso.