En un avance significativo hacia el futuro urbanístico de la capital española, Adif y Renfe han establecido un acuerdo con Crea Madrid Nuevo Norte para la venta de terrenos ferroviarios que servirán de base para el desarrollo de un ambicioso proyecto en el norte de Madrid. Este acuerdo culminará en un cierre formal antes del 30 de diciembre, asegurando la evolución de un área clave para la ciudad.
La fecha límite del acuerdo inicial, que concluye el 30 de noviembre, ha requerido una extensión de un mes adicional para garantizar que el traspaso se realice ante notario con la debida seguridad jurídica. Las partes intervinientes han expresado la importancia de este paso adicional, buscando la transparencia y la legalidad en el proceso, como informaron a Europa Press.
En la actualidad, las entidades públicas relacionadas con el transporte ferroviario están en proceso de presentar el acuerdo a sus respectivos órganos de gobierno. Este paso es crucial para formalizar la escritura de transmisión de los terrenos y los derechos de aprovechamiento de los espacios ferroviarios comprendidos entre Chamartín y Fuencarral.
Desde el inicio de este proceso, que ha tomado fuerza desde 2020, Adif, Renfe y otros organismos como el Catastro y los Registros de la Propiedad han colaborado estrechamente para registrar de manera precisa los terrenos y derechos asociados a la propiedad pública ferroviaria. Este esfuerzo ha sido fundamental para dar claridad a la operación y facilitar su desarrollo.
Un hito importante en esta iniciativa fue la aprobación en marzo de 2020 de una Modificación Puntual del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM), centrándose en el área conocida como 'Prolongación de la Castellana'. Este cambio normativo abrió la puerta a la creación de tres nuevas Áreas de Planeamiento Específico: Malmea-San Roque-Tres Olivos, Las Tablas Oeste y el Centro de Negocios Chamartín. Además, incluye la estación de Chamartín como un cuarto eje fundamental del proyecto.
El desarrollo de Madrid Nuevo Norte abarca una extensión de 5,6 kilómetros en dirección norte-sur, equivalente a la distancia que separa a Plaza de Castilla de Neptuno. Este ambicioso proyecto se desplegará sobre 3.356.196 metros cuadrados, donde se prevé destinar 400.000 metros cuadrados a áreas verdes, contribuyendo así a la sostenibilidad ambiental de la zona.
Entre las características destacadas, se contempla la creación de un Parque Central que ocupará 13 hectáreas, además de que el 76,65% del espacio en el proyecto será de uso y propiedad pública. Asimismo, se planifican nuevas conexiones que cruzarán sobre las vías de tren y la M-30, incluyendo cinco puentes, un túnel y una pasarela peatonal, totalizando hasta 20 hectáreas de vías de tren cubiertas, lo que mejorará notablemente la conectividad.
El desarrollo también tiene un enfoque social y urbano, prevé la construcción de 10.500 viviendas, de las cuales 2.100 estarán protegidas. Este aspecto resulta crucial para atender la demanda habitacional y promover un acceso más equitativo a la vivienda en la región. Además, se planteará rematar el borde urbano del barrio de Las Tablas e integrar mejor la infraestructura ferroviaria en el tejido urbano, reduciendo la fractura que hasta ahora ha causado y favoreciendo así la conectividad viaria en la zona norte hacia Las Tablas y el casco histórico de Fuencarral.
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