En las últimas declaraciones del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, se ha cuestionado la viabilidad del enfoque que el PSOE ha mantenido durante las últimas tres décadas en la capital. El regidor subrayó la notable ausencia de procesos internos en la elección del dirigente socialista, Óscar López, quien ocupa el cargo de secretario general del PSOE-M y también es ministro de Transición Digital y Función Pública.

Almeida argumentó que la elección de López como candidato único plantea interrogantes sobre la auténtica democracia interna del partido, sugiriendo que esta decisión podría haber sido orquestada desde lo alto, específicamente desde el despacho del presidente Pedro Sánchez en Moncloa. “¿Es que no había más aspirantes interesados en liderar el PSOE de Madrid o simplemente se optó por designar a López como el enviado del presidente?”, cuestionó el alcalde durante un evento en el parque Atlético de Madrid.

Además, el alcalde expresó su desacuerdo con la estrategia de López, afirmando que el insistir en un discurso que ha fracasado repetidamente en Madrid no es la solución. Según Almeida, el PSOE continúa en un carrusel de tópicos antiguos sobre privatización y demonización del Partido Popular, lo que a su juicio no contribuye a cambiar la percepción del electorado. “La pregunta es si de verdad seguirán con esos clichés desfasados frente a los resultados electorales que ha cosechado el PP”, indicó con claridad el alcalde.

Con un tono crítico, Almeida remarcó que el PSOE ha cometido un error crucial al implementar un enfoque anticuado, al describirlo como la elección de un "paracaidista" que presenta un discurso repetitivo. Este enfoque, según el alcalde, ha sido un factor determinante que ha relegado al partido a la tercera posición tanto en el Ayuntamiento como en la Asamblea de Madrid. La insistencia en estrategias que han demostrado ser ineficaces durante años solo perpetúa el estancamiento político en la ciudad, concluyó.