El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales se encuentra en medio de un juicio por un beso no consentido y presuntas coacciones a la futbolista Jennifer Hermoso, por lo que enfrenta una posible condena de 2 años y 6 meses de cárcel.

MADRID, 9 Feb.

Rubiales, junto con otros acusados como el exseleccionador femenino Jorge Vilda, el exdirector de Marketing de la RFEF Rubén Rivera y el exdirector de la Selección masculina Albert Luque, se sientan en el banquillo por presuntos delitos de agresión sexual y coacciones, enfrentando penas de hasta 1 año y 6 meses de cárcel.

Durante las sesiones del juicio, se han escuchado testimonios de Hermoso, su familia, compañeras de Selección y personas cercanas a Rubiales en la Federación, dejando al descubierto una serie de situaciones incómodas y presiones ejercidas sobre la jugadora.

Hermoso ha relatado cómo se sintió faltada al respeto por Rubiales y cómo le arruinó un día especial en su vida con un beso inapropiado. Además, testigos han detallado las supuestas presiones recibidas para minimizar el incidente.

La tensión en el juicio ha sido evidente, con el juez reprendiendo a abogados, testigos y acusados por sus actitudes y respuestas. Incluso se ha cuestionado la veracidad de algunos testimonios, lo que ha aumentado la polémica en torno al caso.

En medio de declaraciones conflictivas y acusaciones cruzadas, la justicia ahora deberá decidir el desenlace de este caso y si Rubiales y los demás acusados enfrentarán las consecuencias de sus acciones.