Las Rozas, 17 de septiembre. El delegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Francisco Martín, ha denunciado enérgicamente la decisión del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón de clausurar de manera definitiva el centro de refugiados CREADE. Esta acción, según su perspectiva, revela un preocupante trasfondo racial, ya que se ha optado por cerrar las puertas a migrantes cuyo único "pecado" es no compartir el mismo color de piel que aquellos que previamente fueron acogidos.

Martín, tras participar en una reunión de la Junta Local de Seguridad en Las Rozas, criticó que Pozuelo mostró una actitud hospitalaria hacia los cientos de ucranianos que buscaron refugio durante la guerra, pero ahora, ante el posible asentamiento de migrantes de otros orígenes, se adopten medidas de exclusión. “Es inaceptable y triste”, afirmó el delegado, quien señaló que esta doble moral en la recepción de refugiados es un indicativo de actitudes racistas latentes.

El delegado también anunció que el Ministerio de Inclusión está preparado para actuar en el ámbito judicial tan pronto como reciba la notificación oficial del Ayuntamiento, al que instó a encontrar soluciones efectivas en lugar de perpetuar problemas. Además, hizo un llamado directo a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, a rechazar cualquier comportamiento racista que, a su juicio, se está manifestando en este caso.

Por su parte, el Ayuntamiento de Pozuelo justificó su decisión destacando que tras un análisis de las alegaciones emitidas por el Ministerio, se han cerrado las operaciones del CREADE. En su declaración, el Consistorio indicó que se está otorgando un periodo de cuatro meses para reubicar a las más de 400 personas que residen actualmente en el centro, buscando evitar un desalojo abrupto y garantizando así un trato más humano hacia los afectados.