En un contexto de creciente preocupación por la seguridad en Madrid, el delegado del Gobierno, Francisco Martín, ha solicitado formalmente al alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, que convoque una Junta Local de Seguridad. El objetivo de esta reunión es examinar los datos de criminalidad correspondientes al primer semestre del año.

La solicitud se realizó mediante una carta enviada el pasado martes, en la que el delegado propone un encuentro para discutir las cifras recién divulgas. Este gesto no solo busca mantener un canal de comunicación, sino que también responde a la necesidad de cumplir con la normativa que establece la realización de estas juntas cada seis meses. En la última sesión, celebrada en febrero, Martín ya había enfatizado la importancia de este tipo de análisis, según fuentes de la Delegación.

A pesar de cierto escepticismo, los datos revelan que la criminalidad en la capital española ha registrado una leve disminución del 4,8%, lo que, según Martín, posiciona a Madrid como "una de las ciudades más seguras del planeta". Esta afirmación refuerza la idea de que, a pesar de los retos, la capital avanza hacia un entorno más seguro para sus ciudadanos.

Sin embargo, la relación entre Martín y Almeida ha estado marcada por tensiones y desencuentros. En reciente ocasiones, el alcalde ha excluido al delegado de eventos institucionales relevantes, tales como la celebración de San Isidro y la festividad de San Juan Bautista, el patrón de la Policía Municipal. Almeida ha llegado a calificar a Martín como un "vocero del PSOE", sugiriendo que su enfoque promueve una "bronca permanente" y sostiene "provocaciones que son ridículas".