Desde Antaxi consideran que la convivencia entre el servicio de taxi y los VTC es "difícil" debido al gran número de licencias VTC y a las "infracciones" que cometen.
MADRID, 10 Sep.
Los madrileños están optando cada vez más por el taxi para sus desplazamientos en comparación con los servicios de Arrendamiento de Vehículos con Conductor (VTC), con un 43,5% que elige el servicio de interés público frente al 36,7% que se decanta por los VTC. La valoración positiva del taxi se debe a su inmediatez, profesionalidad, seguridad, experiencia y precio.
Estos datos se desprenden del informe 'Valoración de la cobertura de la demanda de servicio de taxi y VTC' elaborado por Sigma Dos, que revela que el 81,2% de la población en la Comunidad utiliza el taxi con cierta frecuencia y el 88,1% recurre a ambos servicios. Un 24,1% ha dejado de utilizar los VTC por razones como la falta de necesidad, el aumento de precios, la falta de profesionalidad o malas experiencias.
En una rueda de prensa en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, el presidente de la Federación Profesional del Taxi de Madrid (FPTM) y de Antaxi, Julio Sanz, junto con representantes de Sigma Dos, presentaron este informe basado en encuestas a 1.400 madrileños realizadas el mes pasado.
Según el presidente de Antaxi, este estudio refuerza la idea de que el taxi es considerado un medio de transporte de excelencia en Madrid y otras grandes ciudades, destacando su seguridad, profesionalidad, garantía de precios y presencia en las calles. Señaló que los ciudadanos ya no confían en las campañas de marketing agresivas de las VTC.
El informe también revela que un 20,3% de los usuarios de VTC han experimentado que el precio final cobrado ha sido superior al ofrecido al solicitar el servicio, lo que evidencia un desconocimiento en la regulación de precios de VTC. Un 76,1% de los encuestados considera que el precio de los VTC debe mantenerse sin cambios incluso ante un aumento de la demanda.
Los conductores de taxi son mejor valorados en términos de profesionalidad, conocimiento de las calles, seguridad y rapidez en comparación con los conductores de VTC, según el estudio. Además, la mayoría de la población tiene una visión positiva del servicio de taxi y rechaza el aumento de licencias de VTC debido a problemas como el tráfico y la contaminación.
Julio Sanz destacó la difícil convivencia entre el taxi y los VTC debido al aumento desproporcionado de licencias VTC y las infracciones cometidas. Señaló que la regulación de VTC en la región es escasa y poco rigurosa, lo que dificulta el control y la inspección.
En conclusión, desde Antaxi se muestra satisfacción por el incremento de la confianza de los madrileños en el taxi, destacando la fidelidad hacia este servicio después del auge de campañas agresivas de las plataformas de VTC. Se espera una correcta convivencia en el futuro una vez que se mejore la regulación y el control de los servicios de transporte.
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