En un reciente acontecimiento en Madrid, la presidenta de la Comunidad y del Partido Popular en la región, Isabel Díaz Ayuso, ha expresado su desaprobación hacia las manifestaciones a favor de Palestina que tuvieron lugar el sábado en Bilbao. Según Ayuso, estas movilizaciones, que pretendían abogar por la paz, en realidad incitaban a la violencia, haciendo un llamado a la llamada "kale borroka".

Durante su intervención en la clausura de la primera convención ideológica organizada por Nuevas Generaciones de Madrid, Ayuso argumentó que ciertos sectores de la izquierda no son antisemitas por su apoyo a la causa palestina, sino que su interés en esta causa se origina en un trasfondo antisemita. Con estas declaraciones, Ayuso buscó deslegitimar a aquellos que defienden los derechos palestinos bajo el argumento de una falsa paz.

La líder madrileña añadió que Europa no puede tolerar que la violencia genere más violencia y que grupos que se oponen a la libertad se unan para vandalizar las calles y pretender hablar en nombre de toda la sociedad. Ayuso enfatizó la necesidad de un rechazo firme a tales actitudes, instando a una defensa de la civilidad y la convivencia pacífica.

Las marchas en Bilbao, que atrajeron a unas 50,000 personas, se llevaron a cabo en el contexto de un partido entre las selecciones de fútbol del País Vasco y Palestina. Además de mostrar solidaridad con Palestina, los manifestantes también pidieron la oficialización de la selección vasca de fútbol, marcando un intento por reclamar derechos sociopolíticos.

Sin embargo, durante el recorrido, se reportaron incidentes en los cuales cuatro contenedores fueron incendiados en la Gran Vía de Bilbao, y algunos de los participantes arrojaron objetos como botellas hacia la policía autonómica. También se detectaron el uso de bengalas y petardos, eventos que generaron un ambiente de tensión durante la manifestación.