Desmantelan banda especializada en robo de mercancía en naves de varias provincias.

La Guardia Civil ha logrado recuperar gran parte del material sustraído en una operación que desmanteló una organización criminal especializada en robos con fuerza por el procedimiento del butrón, conocida como 'Operación Gredos'. El botín está valorado en casi un millón y medio de euros y la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid informó sobre este importante golpe este viernes.

Agentes de la Guardia Civil del Área de Investigación de Navalcarnero y del Equipo de Policía Judicial de Arroyomolinos llevaron a cabo esta exitosa operación, que logró desarticular a la banda que operaba en varias provincias y había logrado hacerse con un gran botín en apenas dos meses.

La investigación se inició tras un robo con fuerza en una nave industrial en Sevilla La Nueva, donde los ladrones lograron hacerse con productos valorados en 60.000 euros, así como vehículos que utilizaban para trasladar la mercancía sustraída. Posteriormente, los agentes asociaron esta furgoneta con otro robo en Alovera, Guadalajara, lo que les permitió avanzar en la investigación.

Gracias al análisis de los robos, los agentes identificaron a uno de los sospechosos y lo relacionaron con otros 6 robos en diversas provincias, lo que les llevó hasta una organización criminal altamente especializada en robos con fuerza por el procedimiento del butrón.

La banda se dedicaba a robar establecimientos de distribuidoras de bebidas, almacenes de tabaco, ropa y perfumes, utilizando vehículos robados para las aproximaciones y las huidas, y contaban con sofisticados inhibidores de frecuencia para desactivar los sistemas de seguridad. El botín era guardado en una finca en Villaviciosa de Odón y distribuido posteriormente.

En total, la organización se hizo con un botín de 1.473.763 euros, destacando el robo en un distribuidor en Pinto donde sustrajeron 712.000 euros en perfumería y botellas de alcohol exclusivas. Tras la investigación, se realizaron detenciones y se recuperó una gran cantidad del material sustraído, así como armas de fuego que habían sido robadas en otro incidente.

Los detenidos, de origen español, rumano y kosovar, enfrentan cargos por pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales, robo con fuerza y sustracción de vehículos, y parte de ellos han sido enviados a prisión como medida cautelar. La justicia ha decretado otras medidas, como el cierre provisional de un establecimiento con licencia de estanco vinculado a la organización criminal.