En un operativo destacado por su magnitud, la Policía Nacional ha llevado a cabo la desarticulación de un clan familiar especializado en la producción y distribución de marihuana, con base en las localidades de Madrid y Toledo. Esta operación se ha desarrollado en respuesta a la creciente preocupación por el tráfico de drogas en la capital, según la información proporcionada por la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.

Las acciones de la policía han culminado con la detención de 12 individuos, todos ellos relacionados entre sí, a quienes se les imputan múltiples delitos, entre ellos el tráfico de drogas y la defraudación de fluido eléctrico. En el marco de esta investigación, se efectuaron siete registros en diversos domicilios y propiedades situadas en Madrid y Escalona, donde se desmantelaron tres sofisticadas plantaciones de marihuana 'indoor'.

El origen de esta investigación se remonta al mes de abril, cuando los agentes comenzaron a rastrear las actividades de un clan familiar que había establecido un sistema de operaciones para el tráfico de drogas en la capital. A medida que avanzaban las indagaciones, se descubrió que este grupo delictivo operaba con una estructura dual, que lo hacía aún más complicado de desmantelar.

Uno de los segmentos de esta organización se encargaba de la adquisición de la marihuana, comprándola a otros grupos criminales. Una residencia particular del clan funcionaba como un centro de almacenamiento y procesamiento, donde además se llevaban a cabo las transacciones económicas asociadas a la venta de la droga. Este tipo de operativa reflejaba un alto grado de organización y planificación.

Simultáneamente, otro equipo dentro de la misma red se dedicaba a recuperar la marihuana de cultivos que pertenecían a otras organizaciones. Esta estructura facilitó el transporte de la droga a la denominada 'guardería' del clan, donde la mercancía era almacenada hasta su distribución.

Las tres plantaciones 'indoor' que han sido desmanteladas localizadas en Escalona proporcionaban a la organización un suministro continuo y diversificado, dado que cada una estaba en diferentes etapas de crecimiento. Este enfoque les aseguraba una cosecha constante, apoyada por un grupo de cuidadores que se encargaban de atender las plantas y mantener las instalaciones en operatividad.

El operativo culminó el 16 de octubre, cuando se realizaron los registros en Madrid y Escalona. Las autoridades intervinieron 500 plantas en floración, además de 500 plantones, un arma de fuego, cerca de 11,000 euros en efectivo, un lujoso reloj y 68 boletos de lotería, todos elementos que subrayan la envergadura del negocio ilícito que operaba esta familia.

Como resultado de estas acciones, 12 personas fueron detenidas, entre las que se encontraban 11 hombres y una mujer, todos acusados de pertenencia a una organización criminal, así como de delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y tenencia ilícita de armas. Posteriormente, tres de ellos fueron ingresados en prisión provisional tras comparecer ante la autoridad judicial, lo que refleja la seriedad de las acusaciones y la intención del sistema judicial de combatir estas redes delictivas con firmeza.