En la mañana del miércoles 4 de diciembre, la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional llevó a cabo una intervención en un hotel okupado ubicado en el distrito de San Blas-Canillejas, Madrid. Esta acción se produjo en respuesta a los recientes acontecimientos violentos que han tenido lugar en la zona, según informaron fuentes policiales a Europa Press.

El último de estos incidentes ocurrió el pasado lunes a las 5:30 de la mañana, cuando una disputa entre dos jóvenes se tornó violenta. Las circunstancias que llevaron a este altercado aún se desconocen, pero resultó en que un hombre de 27 años sufrió lesiones por cuchilladas en su brazo y en el homóplato izquierdo, aunque afortunadamente sus heridas no revisten gravedad.

El servicio de emergencias Summa 112 llegó rápidamente a la escena del suceso. Los sanitarios atendieron al herido y, a su solicitud, lo trasladaron al hospital para una evaluación médica completa, tal y como confirmó una portavoz de Emergencias de la Comunidad de Madrid.

La policía se encuentra en busca del agresor, así como de un hombre colombiano señalado como el autor de un crimen reciente en el que perdió la vida su compatriota de 36 años, un hecho que surgió a raíz de un enfrentamiento entre dos equipos de fútbol en la ciudad colombiana de Cali. Este conflicto siguió a otra reyerta que tuvo lugar un día antes y, semanas más tarde, se reportó la muerte de una mujer de 25 años debido a la intoxicación provocada por los gases de un generador en el mismo contexto.

La situación en el hotel okupado es crítica, ya que solo unas semanas atrás, el 5 de noviembre, tuvo lugar una violenta pelea que involucró a un gran número de personas armadas con navajas y machetes. Este enfrentamiento culminó con la detención de seis individuos y dejó a dos heridos, entre ellos un agente de policía. Las tensiones en el lugar aparentemente están ligadas a la presencia de una pandilla latina que se había adueñado del antiguo apartahotel, siendo el trasfondo de este altercado la falta de pago de uno de los inquilinos por el uso del espacio que había okupado, lo cual había generado un conflicto con la mafia que controla el inmueble.