La Comunidad de Madrid avanza en la modernización de su sistema educativo, especialmente en lo que respecta a la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU). Este lunes, la Comisión Organizadora de la PAU ha dado a conocer los nuevos modelos de examen que se aplicarán en la convocatoria de 2026, marcando un hito significativo en la evaluación académica.

Uno de los cambios más notables es la introducción de una nueva escala de corrección, que ahora utilizará incrementos de 0,1 en lugar de 0,25. Esta modificación tiene como objetivo ofrecer una evaluación más precisa del rendimiento de los estudiantes, un aspecto crucial en la educación superior.

Las seis universidades públicas de la región han emitido comunicados donde subrayan que los exámenes se basarán en un 70% de los criterios establecidos por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE). Este paso es parte de un esfuerzo más amplio para lograr una mayor uniformidad en las pruebas a nivel nacional.

En el marco de este proceso, Madrid se posiciona como una de las comunidades que ha hecho progresos significativos hacia la armonización de sus exámenes con los de otras autonomías, lo que refleja un compromiso con un sistema educativo más integrado y coherente.

De cara al curso académico 2026-27, se anticipa que algunas materias completarán su proceso de armonización, mientras que otras continuarán en revisión. Sin embargo, los cambios en comparación con el año anterior no son drásticos, lo que sugiere una transición cuidadosa y meditada.

Los nuevos modelos de examen, creados por las Comisiones de Materia, están alineados con el Decreto 64/2022, que regula el currículo del Bachillerato en la región. Cada examen adoptará una estructura única que se organizará en bloques temáticos según los contenidos esenciales del currículo educativo.

Estas evaluaciones incluirán distintos tipos de preguntas, garantizando que al menos el 70% de la puntuación total provenga de preguntas abiertas o semiabiertas. Además, la prueba mantendrá un grado de elección en las preguntas, asegurando que al menos el 50% de la calificación total provenga de opciones seleccionadas por los estudiantes.

Finalmente, en cumplimiento del Real Decreto 534/2024, se establecerá que un mínimo del 20% de las preguntas tengan un enfoque competencial, promoviendo así la aplicación práctica de los conocimientos adquiridos por los alumnos.

Con estas medidas, la Comisión Organizadora de la PAU 2026 busca consolidar un proceso de evaluación que sea riguroso y equitativo, alineándose con los estándares de calidad educativa a nivel nacional.