En medio de acusaciones y polémicas, la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, se defiende ante las acusaciones de tener vínculos con el presunto conseguidor de la trama Koldo, Víctor de Aldama. Maroto ha declarado que se encuentra en una "caza de brujas" y que no puede recordar si conoció personalmente a Aldama, afirmando que su relación se limitó a un proyecto turístico.

En una comparecencia ante los medios de comunicación, Maroto ha expresado su frustración ante la situación, señalando que su equipo legal está revisando el caso y reiterando que ya aclaró su posición en una comisión de investigación en el Senado la semana pasada. La política ha denunciado que el Partido Popular no está interesado en la verdad y que está siendo objeto de persecución política por su labor de denunciar prácticas corruptas en la administración local y regional.

Manifestándose firme en sus convicciones, Maroto ha llamado a dejar de lado las diferencias políticas para trabajar en pro del bien común. Ha insistido en que no se va a dejar intimidar por el PP, que considera la región y la ciudad como su propio feudo. La portavoz socialista ha asegurado que seguirá defendiendo los intereses de los madrileños a pesar de las presiones y ataques en su contra.

La polémica se desató luego de que se revelara que Víctor de Aldama contactó a Maroto para proponer un proyecto de reactivación turística en Madrid en medio de la pandemia. A pesar de que la propuesta no se concretó, Maroto ha aclarado que simplemente transmitió el mensaje al director de Turespaña. El proyecto incluía la organización de un concierto en la capital y habría sido presentado a distintas administraciones.

Finalmente, Maroto ha reiterado que no niega haber tenido contacto con Aldama, sino que exige pruebas concretas sobre cualquier acusación en su contra. La política también ha expresado su desconcierto ante la forma en que se obtuvo su número de teléfono, aumentando la incertidumbre en torno a este controvertido caso.